En otoño París, la ciudad del amor , se tiñe de colores cálidos que alegran el corazón. Ideal para una escapada romántica, aunque sea solo un fin de semana, la capital francesa ofrece la magia de lugares como la Torre Eiffel, los Campos Elíseos y Notre Dame. Los amantes del arte no pueden dejar de detenerse en el Museo del Louvre y admirar la inmensidad del Arco de Triunfo. No faltan cafés en las calles adoquinadas y artistas callejeros talentosos.