¡Relájate y duerme como bebé!
Dos minerales lo convierten en paladín de la lucha por relajar los músculos: el potasio y el magnesio. Nuestros cuerpos necesitan descansar, y nuestras mentes aliviarse del tráfico continuo de ideas, para reparar el desgaste que ocasiona en nosotros el diario ajetreo.