Valverde de la Vera es el lugar donde nace esta procesión. Los hombres que hacen una promesa a la cofradía deben colocarse un mástil de madera, de forma horizontal, sobre los brazos (simulando una cruz) además de llevar una corona de espinas y un velo, para luego recorrer el itinerario del vía crucis, en las calles de la localidad.