El lujo por definición. Además de aportar una de las marcas de mayor relevancia del sector automovilista, se caracteriza por la total elegancia de su diseño. Solamente para los conductores más distinguidos. No en vano, su acabado va en la línea de lo que esperan sus compradores. Sin apenas fisuras en su construcción, aunque su precio es uno de los más prohibitivos del mercado nacional. Constituyéndose, en cualquier caso, en uno de los coches de lujo que puedan faltar en ninguna lista.